Momentos de perdón

“Momentos de Perdón” es un excelente ejemplo del verdadero cine independiente norteamericano: una historia pequeña, íntima, de escaso presupuesto, carente de super estrellas, con algunos cuestionamientos al sistema de vida estadounidense.

La cinta tiene dos líneas narrativas que al final se unen.

Por un lado, una chica haciendo circo maroma y teatro para poder cocinar un pavo para la cena de acción de gracias, por el otro, una familia que hace un recorrido de Pennsylvania a Nueva York para asistir a dicha cena.

April (Katie Holmes) es una chica punky rebelde, la oveja negra de la familia, que vive en un destartalado apartamento con su novio de color.

Gracias a un ataque impulsivo que aún no comprende del todo, decide reunir a su familia convencional y provinciana en su derruido departamento neoyorquino.

Lamentablemente, April no tiene mucho conocimiento de las artes culinarias, vamos, ni siquiera sabe agarrar un cuchillo. Por si esto fuera poco, pronto descubre con horror que el horno (que hasta ahora utilizaba para guardar cosas) está completamente roto.

Al borde de la desesperación, comienza angustiosamente a tocar puertas por todo el bloque de apartamentos, buscando de algún vecino que le preste su estufa para hornear su pavo, en una carrera contra el tiempo.

La ocasión es algo especial, pues tal vez esta sea la última vez que estén reunidos, pues su madre sufre un cáncer terminal, y April ve este momento como la inmejorable oportunidad de una reconciliación familiar.

La vagoneta donde viajan estos personajes es en sí un divertido circo: una abuela con alzheimer, una adolescente incomprendida, el hijo fotógrafo oficial de la familia y “dealer” de la madre, un padre (Oliver Platt genial como siempre) que busca ser el conciliador entre todos estos personajes y Joy, una madre que no pierde la oportunidad de atascarse de donas y dulces, aventarse un buen porro para disfrutar del camino, además de hacerle la vida de cuadritos a Beth, su hija.

El camino entre la casa de los Burns y Nueva York se convierte en un viaje alucinante. Y es que Joy, a pesar de su frágil estado de salud, es una madre que no cesa de ejercitar sus ácidos comentarios sobre cada situación que se le presenta.

Patricia Clarkson una vez más demuestra su adaptabilidad para cualquier papel. Con más de cuarenta años, Clarkson está atravesando el momento más alto de su carrera, que inició en “Los intocables”, como la esposa de Elliott Ness.

Recientemente la hemos visto en “Vidas en Común” y “Dogville”. En “Pieces Of April” Patricia Clarkson se roba la pantalla cada vez que aparece, haciendo que su nominación al Oscar como Mejor actriz de reparto le quedara chica, muy chica.

A pesar de que el filme parte de un hecho relacionado con una celebración típicamente americana, el día de acción de gracias, las diferencias familiares que pueden terminar en desastre son un tema universal con el que todos podemos sentirnos identificados.

El melodrama tiene momentos brillantes, manejando un humor corrosivo aderezado de un pesimismo inteligente.

Nuestra Opinión: @@@1/2

Momentos de Perdón
(Pieces of April, Estados Unidos 2003)
Dirección y guión: Peter Hedges
Con: Katie Holmes, Patricia Clarkson, Oliver Platt, Sean Hayes, Derek Luke, Alison Pill.
Duración: 80 minutos
Distribución en México: Arthaus Films
Clasificación: @ Insoportable, @@ Regular, @@@ Buena, @@@@ Obra Maestra