Números y Reflexiones

GUADALAJARA.- Algunos ponen el grito en el cielo con solo escuchar la idea, sin embargo no es del todo descabellada.

Desaparecer la sección competitiva mexicana, hacer crecer la Muestra a un Festival Internacional y entonces si, en una sola sección poner a competir al tú por tú las cintas mexicanas con las extranjeras.

Eso obligaría que las películas mexicanas participantes tuvieran un mínimo de calidad para no hacer el ridículo.

La Muestra de Guadalajara desde sus inicios tenía como intención ser el principal escaparate del cine mexicano. Ahora que el cine mexicano no da una, la Muestra sufre las consecuencias.

Pero las mentes conservadoras pueden estar tranquilas.

El patronato de la Muestra de Guadalajara encabezado por Raúl Padilla no tiene intención, por el momento, de hacer semejante cosa.

“Temporada de Patos” arrasó en la Sección Oficial Mexicana de la XIX Edición de la Muestra de Cine en Guadalajara por ser una película bien hecha, pero también porque no hubo quien le hiciera sombra.

A este respecto, los invitados especiales a la Muestra se sorprendieron de la cantidad de cintas mexicanas en competencia y más al conocer que el año pasado se estreno poco mas de media docena de largometrajes, una cifra francamente ridícula.

La observación de los cineastas extranjeros fue en el sentido de que nuestra industria cinematográfica siguiera el ejemplo de Brasil, España, Argentina o Francia, donde el gobierno ha visto al cine como un negocio y se ha volcado a darle su apoyo incondicional, sin importar la situación económica.

Aquí en México, parece que a nadie le importa. Ni a la gente de la industria, ni al gobierno. Que cada quien se rasque con sus uñas.

Ojalá que “Temporada de Patos” no tenga el mismo destino de “Cuentos de Hadas para dormir cocodrilos”, cinta que triunfó en la Muestra de Guadalajara y en los Arieles, pero que estuvo enlatada casi un año para luego conseguir un distribuidor (Artecinema) que la sacó a cartelera de mala gana.

Fernando Eimbcke con sus patos y Beto Gómez con la visión fresca del mundo fronterizo en “Puños Rosas”, son el claro ejemplo de que la visión de autor no está peleada con el cine comercial y de que puede resultar entretenida y propositiva.

Por otro lado, la Muestra exhibió las grandes porquerías que se pueden lograr en el cine digital. Lo triste del caso es que se trata de cineastas con cierto prestigio. Lo que han hecho Jaime Humberto Hermosillo con “El misterio de los almendros” y Gabriel Retes en “@festivercine.ron” es un ejemplo para los estudiantes de cine de las cosas que funcionan para aburrir.

Lo de Retes es ególatra, una oda a sí mismo. Lamentablemente sufrió el síndrome de su película: en la cinta a Retes nadie lo pelaba, en la Muestra, nadie hizo caso a Retes, incluso fuimos testigos como en algunas fiestas se tuvo que retirar pues era ignorado olímpicamente.

Es una pena que estos cineastas sirvan de ejemplo negativo de lo que el cine mexicano no necesita. Peor aún, ellos no se han dado cuenta.

El caso es que a diferencia de otras cinematografías, el cine digital está en pañales.

Un punto medio entre todas las propuestas presentadas en la Muestra es “Adán y Eva (todavía)” que maneja una propuesta de cine experimental que raya en el perfomance psicodélico. La película es sórdida, provocativa por el mero deseo de hacerlo, hueca, sin propuesta. Hay que reconocerle que al menos logró moverle el ánimo al espectador, aunque se desprecia su petulancia y soberbia del director Iván Ávila dueñas al declarar que su cine es arte y no tiene porqué andar dando explicaciones.

La sección oficial Iberoamericana reparte menos premios que la Mexicana, de ahí que no pudieron entrar películas como la brasileña“El hombre que copiaba” o la aquí reseñada “María, eres llena de gracia”, que causaron grata impresión entre el público asistente a la Muestra.

A los números les puede dar cualquier interpretación, su frialdad así se los permite.

La numeralia de la XIX Muestra de Cine Mexicano e Iberoamericano de la Muestra de Cine en Guadalajara puede leerse como un éxito en varios apartados o como un fracaso en otros.

Lo cierto es que no se le puede reprochar a la Muestra habernos ofrecido un amplio y diverso abanico de cintas, algunas de ellas muy buenas, otras más que pasaran al olvido.

De los siguientes números y datos, cada quien puede sacar sus propias conclusiones.

Cifras de la XIX Muestra de Cine en Guadalajara

- 24 largometrajes mexicanos
- 34 cortometrajes mexicanos
- 89 largometrajes iberoamericanos
- 68 cortometrajes Iberoamericanos
- 41 documentales
- 146 películas en exhibición, de las cuales 101 fueron largometrajes y 45 cortometrajes
- 9 largometrajes en la Sección Oficial Mexicana
- 16 cortometrajes en la Sección Oficial Mexicana
- 15 largometrajes en la Sección Oficial Iberoamericana
- 16 cortometrajes en la Sección Oficial Iberoamericana
- 10 largometrajes en la Sección Oficial de Documentales Iberoamericanos
- 26 producciones en formato digital
- 4 sedes tuvo la Muestra, con diez salas de proyección en total
- 3 funciones al aire libre
- 26 países presentaron filmes en el festival
- 170 invitados acreditados en el Segundo Mercado de Cine
- 230 títulos inscritos al Segundo Mercado de Cine
- 180 películas proyectadas en el Segundo Mercado de Cine
- 110 directores de cine, representantes de festivales e instituciones fílmicas participaron en el Segundo Mercado de Cine
- 300 personas inscritas al Primer Seminario Un Mundo de Cine, la Voz de los Creadores
- 27 ponentes tuvo el Primer Seminario Un Mundo de Cine, la Voz de los Creadores
- 7 fiestas hubo durante la Muestra
- 280 invitados de la Muestra para su XIX edición, entre los que hubo 41 directores de cine, 20 de ellos mexicanos
- 18 jurados divididos en las distintas secciones
- 14’670,544 fue el presupuesto la Muestra.

Los Mayahueles

- Mejor largometraje mexicano: “Temporada de patos”, de Fernando Eimbcke (100 mil pesos)
- Mejor director mexicano: Fernando Eimbcke (100 mil pesos)
- Mejor largometraje iberoamericano: “Te doy mis ojos”, de Iciar Bollaín
- Menciones especiales para: “Extraño” y “Os narradores de Javé”
- Mejor director iberoamericano: Daniel Burman, por “El abrazo partido” (100 mil pesos)
- Mejor documental iberoamericano: ex aequo para “La pelota vasca”, de Julio Médem, y “Juego de niños”, de Joaquín Jordá (75 mil pesos)
- Mejor cortometraje mexicano: “La luna de Antonio”, de Diana Cardozo (50 mil pesos)
- Mejor corto iberoamericano: “Sueños”, de Daniel Guzmán (50 mil pesos)
- Mejor fotografía: Ciro Cabello y Alejandro Cantú, por “Adán y Eva (Todavía)”
- Mejor guión: Fernando Eimbcke, por “Temporada de patos”
- Mejor actor: Compartido, para Enrique Arreola y Roberto Espejo, por “Temporada de patos” y “Puños rosas”.
- Mejor actriz: Danny Perea, por “Temporada de patos”
- Mejor edición: Daniel Fort, por “Un día sin mexicanos”.
- Mejor música original: Alejandro Rosso, por “Temporada de patos”
- Mejor dirección de arte: Hania Robledo, por “Puños Rosas”
- Mejor diseño sonoro: Lena Esquenazi, por “Temporada de patos”
- Mejor opera prima: ex aequo, “Adán y Eva (todavía)”, de Iván Ávila Dueñas y “Un día sin mexicanos”, de Sergio Arau

Premios de la Federación Internacional de críticos Cinematográficos (FIPRESCI)

- Premio FIPRESCI Mejor película mexicana: “Temporada de patos”
- Premio FIPRESCI Mejor película iberoamericana: “Te doy mis ojos”
- Premio JVC (500 mil pesos): Fernando Eimbcke, por “Temporada de patos”

Premios del público

- Premio del Público Mejor película mexicana: “Un día sin mexicanos”
- Premio del Público Mejor película iberoamericana: “Te doy mis ojos”
- Premio del Público Mejor película infantil: “El Cid, la leyenda”, de José Pozo

Correspondencia con esta festivalera columna:

obsesionesmx@yahoo.com.mx